La NBA ha anunciado una suspensión de 25 partidos para Bobby Portis, jugador de los Milwaukee Bucks, tras haber infringido la política antidrogas de la liga. La sanción llega en un momento crucial de la temporada y mantendrá al ala-pívot fuera de gran parte del calendario restante.
Según la información oficial, Portis dio positivo en un control antidopaje por Tramadol, un medicamento para el tratamiento del dolor severo en adultos. Su agente, Mark Bartelstein, defendió que se trató de un error involuntario.
«Bobby está devastado. Fue un descuido genuino con consecuencias muy serias», comentó Bartelstein. «Él creyó que estaba tomando Toradol, un analgésico permitido y que ha utilizado antes. Sin embargo, la pastilla que ingirió era Tramadol, que fue incluido en la lista de sustancias prohibidas el pasado verano».
Impacto en los Bucks y en la temporada de Portis
La ausencia de Portis representa un duro golpe para los Bucks, que actualmente ocupan el quinto lugar de la Conferencia Este con un registro de 29-24. Con esta suspensión, perderán a una pieza clave en su rotación. Además, el jugador dejará de percibir alrededor de 2.85 millones de dólares por los partidos que no disputará.
El ala-pívot ha sido un pilar fundamental desde la banca esta temporada, promediando 13.7 puntos y 8.3 rebotes en 46 encuentros. Se encuentra entre los mejores jugadores de la liga en aportes desde el banquillo, figurando como sexto en puntos y segundo en rebotes entre suplentes.
Portis podrá regresar a la acción el 8 de abril, en un partido contra los Minnesota Timberwolves, cuando queden apenas cuatro juegos de la fase regular.
