Los Indiana Pacers están a dos victorias de conquistar su primer campeonato de la NBA, impulsados por una actuación histórica desde el banquillo en el Juego 3 de las Finales. La victoria por 116-107 sobre el Oklahoma City Thunder el miércoles marcó un momento clave en la serie.
Noche estelar para Mathurin
Bennedict Mathurin deslumbró, liderando a todos los anotadores con 27 puntos en apenas 22 minutos y solo 12 tiros intentados. Esta hazaña lo convirtió en el jugador más joven en anotar al menos 25 puntos saliendo desde la banca en unas Finales de la NBA desde que se registran estas estadísticas, en la temporada 1970-71.
Antes de este logro, el último jugador en salir del banquillo para anotar 27 puntos en unas Finales fue Jason Terry con los Dallas Mavericks en 2011, cuando ayudó a su equipo a sellar el campeonato frente a Miami en el Juego 6.
(Photo by Maddie Meyer/Getty Images)
Clave en un momento decisivo
El impacto de Mathurin fue crucial en el primer partido de las Finales de la NBA celebrado en Indiana desde el año 2000. Con el base titular Tyrese Haliburton en el banco, Mathurin tomó el control del ataque al inicio del último cuarto. Su energía ayudó a los Pacers a remontar una desventaja de cinco puntos y tomar brevemente la delantera, hasta que Haliburton regresó a la cancha.
Un repunte en medio de la irregularidad
Esta brillante actuación llega en medio de una postemporada inconsistente para el joven alero de 22 años, cuya participación ha variado notablemente. En el primer juego, Mathurin anotó solo cinco puntos en 16 minutos. Una semana antes, había tenido dos partidos consecutivos de 20 puntos, seguidos por presentaciones con dos y cuatro puntos en las Finales de Conferencia.
A pesar de las fluctuaciones, Mathurin ha logrado anotar al menos 20 puntos en cuatro encuentros durante estos playoffs, consolidándose como una pieza clave en el intento de Indiana por conquistar el título.
