La espera terminó para los fanáticos del fútbol americano. La emoción de la NFL regresa mañana, 4 de septiembre, con el inicio de la temporada regular. El telón se levantará con un clásico de la NFC Este que ya es legendario: los Dallas Cowboys y los Philadelphia Eagles. Este no es solo un partido, es un choque de rivalidad que define el tono para el resto de la campaña.

El esperado duelo inaugural se jugará en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, la casa de los Cowboys. La acción arrancará a las 7:20 p.m., hora de Panamá, en un evento que será transmitido a través de la cadena ESPN. Se espera un ambiente de gala, con una afición dividida y apasionada, lista para un encuentro que va más allá de los puntos en la tabla.
De cara al partido, las expectativas son enormes. Los Cowboys, un equipo con talento en todas sus líneas y liderado por su mariscal de campo Dak Prescott, buscan ratificar su estatus de contendiente y finalmente dar el golpe en la postemporada. Por su parte, los Eagles, conocidos por su poderosa ofensiva liderada por el dinámico Jalen Hurts, y un plantel equilibrado en ambos lados del balón, se perfilan como la principal amenaza para el dominio divisional. Aunque el favoritismo es mínimo debido a la intensa rivalidad, los analistas suelen inclinar la balanza ligeramente a favor de los Eagles por la solidez de su plantilla.

El encuentro es una prueba de fuego para ambos equipos. Es una oportunidad para que los Cowboys demuestren que su ofensiva está lista para dominar y para que los Eagles exhiban por qué son considerados una de las plantillas más completas de la liga. Más allá de la victoria, está en juego el orgullo divisional y la confianza para el resto de la temporada.