La Selección de Panamá logró una victoria 2-0 como visitante ante Belice, en el FFB Field de Belmopán, por la cuarta jornada de la eliminatoria mundialista de la Concacaf.
A pesar del resultado positivo que aseguró su clasificación a la siguiente fase, el ambiente postpartido no fue del todo satisfactorio para el equipo canalero.
Un triunfo que dejó más dudas que certezas
El técnico Thomas Christiansen fue cuestionado por el nivel de juego mostrado en Belice, que estuvo por debajo de lo esperado. Aunque se sumaron tres puntos valiosos, el funcionamiento colectivo del equipo dejó muchas interrogantes, incluso entre periodistas y aficionados que esperaban una actuación más dominante.
“Nos costó más de lo previsto. No encontramos fluidez en el primer tiempo y Belice se plantó bien en su campo”, reconoció Christiansen tras el encuentro.
Dos bajas sensibles para enfrentar a Nicaragua
La victoria ante Belice trajo consigo un saldo negativo: Panamá no podrá contar con dos piezas fundamentales para el duelo decisivo ante Nicaragua, el próximo martes.
José Córdoba y José Luis Rodríguez quedaron suspendidos por acumulación de tarjetas amarillas.
Rodríguez fue amonestado al minuto 34 por una falta dividida.
Córdoba vio la amarilla al 84 por derribar a un rival cerca del área.
Estas ausencias obligarán a Christiansen a reorganizar el once titular, justo en el partido más importante del grupo.
El liderato del grupo D en juego
Con la clasificación asegurada, ahora el objetivo es terminar primero en el Grupo D, algo que no será sencillo. Nicaragua también suma 9 puntos, pero tiene una mejor diferencia de goles (+8) respecto al +6 de Panamá, por lo que el duelo directo será decisivo.