El Inter Miami y toda su afición recibieron un duro golpe el pasado sábado, cuando Lionel Messi abandonó el terreno de juego apenas a los 7 minutos del partido frente al Necaxa por la Leagues Cup, disputado en Estados Unidos. El capitán argentino, que venía firmando una de sus mejores rachas desde su llegada al fútbol norteamericano, sintió un pinchazo en la pierna derecha y pidió el cambio de inmediato, generando una ola de preocupación tanto en el banquillo como en las gradas.
Apenas 24 horas después del partido, el Inter Miami CF emitió un comunicado oficial presentado por Baptist Health, en el que se confirmó que Messi sufre una lesión muscular leve en la pierna derecha. “Su alta médica dependerá de su evolución clínica y respuesta al tratamiento”, indicaron desde el club. Desde el entorno del equipo aseguran que el propio Messi fue clave en evitar una lesión más grave, al detenerse de inmediato al sentir la molestia. Según los primeros pronósticos, la recuperación podría tomar al menos dos semanas.
\La lesión llega en un momento particularmente brillante para Messi, quien venía exhibiendo un estado de forma excepcional en la MLS. En sus últimos 10 partidos oficiales con Inter Miami, el astro rosarino anotó 13 goles y repartió 5 asistencias, el astro argentino esta liderando las estadisticas en la MLS. Este gran nivel individual había colocado al Inter en zona de clasificación y generado expectativas altas de cara al cierre de temporada. Sin embargo, la lesión frena esa inercia positiva justo antes de una serie de partidos claves.
Messi no estará disponible este miércoles ante Pumas por la Leagues Cup, ni el próximo domingo frente a Orlando City en la MLS. El club espera que pueda estar recuperado para el domingo 16 de agosto, cuando Inter Miami enfrente al LA Galaxy en condición de visitante. A pesar de la situación, la lesión no compromete su presencia con la selección argentina, que volverá a competir el 4 de septiembre ante Venezuela y luego el 9 frente a Ecuador en Quito, en el cierre de las Eliminatorias Sudamericanas.
Tras el encuentro, el entrenador Javier Mascherano, fue consultado por la dolencia del ‘10’ y ofreció su lectura “Leo sintió una molestia en el isquiotibial. Hasta mañana no vamos a saber el grado de la lesión. Seguramente algo tenga. Quizás no sea algo tan grande porque no estaba dolorido, pero sí que sintió una molestia”.
El impacto de la salida de Messi fue inmediato. El ambiente en el estadio cambió por completo tras su sustitución: rostros de preocupación en las tribunas, silencio entre los asistentes y una sensación de incertidumbre que se extendió más allá del pitazo final. El incidente se produjo cuando Messi intentaba disputar un balón y, tras una aceleración, detuvo su marcha con gestos de dolor. El cuerpo médico intervino rápidamente y, tras una breve evaluación, el propio jugador decidió no continuar.
Por ahora, el regreso de Messi dependerá de su respuesta al tratamiento y evolución diaria. Lo que está claro es que el Inter Miami tendrá que reestructurar su plan de juego sin su principal figura, justo cuando más lo necesitaba. Para el argentino, la lesión es solo una pausa en un ciclo que, hasta ahora, lo tenía brillando con luz propia en tierras estadounidenses. Todo el mundo del fútbol estará atento a su recuperación. Y mientras tanto, en Miami se hace larga la espera por ver de nuevo al Messi decisivo que llevaba 13 goles en 10 partidos… y que ya se había ganado, otra vez, el corazón de todos.
