El próximo domingo 7 de septiembre, el GP de Italia 2025 no será un Gran Premio cualquiera para Ferrari. La escudería de Maranello se prepara para celebrar en casa un aniversario que forma parte esencial de su leyenda el medio siglo del primer campeonato mundial de Niki Lauda, logrado también un 7 de septiembre de 1975, en este mismo circuito.
La Scuderia Ferrari ha revelado una decoración especial que llevará su monoplaza durante todo el fin de semana en honor al mítico Ferrari 312T con el que Lauda conquistó su primer campeonato. Los SF-25 de Charles Leclerc y Lewis Hamilton incorporarán una serie de elementos visuales únicos. Como el blanco dominante en la cubierta del motor, evocando el esquema del 312T, las líneas vintage, un rojo más oscuro y dorsales enmarcados en blanco. También sus llantas personalizadas, tipografía cursiva para los nombres y un diseño retro que resalta sin romper con la modernidad, y un alerón trasero plateado, en referencia al aluminio usado antes de la era de la fibra de carbono.
Este homenaje no solo celebra el título de Lauda, sino también el éxito colectivo de Ferrari en ese año, en el que también ganó el campeonato de constructores, con la ayuda del piloto suizo Clay Regazzoni, ganador de aquella carrera histórica en Monza.
La decoración conmemorativa no es solo estética. Ferrari ha utilizado una tecnología de rotulación especial desarrollada junto a su socio HP, la misma aplicada en Miami este año. Esta tecnología emplea una película de PVC reciclable, más ligera y resistente al calor, reforzando así el compromiso del equipo con la sostenibilidad. Más allá del coche ropa, cascos y espíritu setentero es un homenaje a Lauda no se limitará al monoplaza. Durante todo el GP de Italia Leclerc y Hamilton vestirán monos, botas y cascos inspirados en los años 70, en clara alusión al estilo de la época. El equipo técnico usará una indumentaria especial con predominancia del azul y el regreso del logo clásico de Ferrari.
Uno de los momentos más esperados del domingo será la participación de Jean Alesi, quien hará una exhibición con el Ferrari 412 T2, el último monoplaza con motor V12 de la escudería, el mismo con el que ganó en Canadá en 1995. Este evento tendrá lugar antes de la carrera y promete erizar la piel de los tifosi.
El homenaje a Niki Lauda llega en un momento clave para Ferrari, que no solo busca conectar con su legado, sino también con sus objetivos deportivos presentes. En 1975, la Scuderia rompió una sequía de 11 años sin títulos. Hoy, 50 años después, con Hamilton y Leclerc al volante, sueña con revivir aquella época dorada.