A sus 39 años, Sergio Ramos sigue demostrando que su hambre competitiva no tiene fecha de caducidad. El histórico capitán del Real Madrid y actual defensor de Rayados de Monterrey atraviesa un gran momento en México y, lejos de pensar en el retiro, ha dejado claras sus intenciones de continuar en el fútbol profesional.

“Ojalá sigamos aquí, porque la verdad es que estamos muy a gusto y muy cómodos”, expresó el camero en una entrevista concedida al programa español El Chiringuito.

El contrato de Ramos con Rayados expira el 31 de diciembre de 2025, pero sus palabras dejan entrever que podría renovar para seguir compitiendo en el fútbol mexicano, donde ha sido una de las grandes figuras del torneo Apertura.

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A pocos días del Clásico entre Real Madrid y Barcelona, programado para este domingo 26 de octubre en el Santiago Bernabéu, Ramos no escondió su pasión merengue. “Ya sabes que soy blanco a muerte. Esperemos que el Madrid gane y que mi brother ‘Kiki’ (Kylian Mbappé) haga una buena actuación. Ya lo motivaré en los próximos días”, afirmó entre risas el central español.

Ramos mantiene una estrecha relación con varios jugadores de la plantilla blanca, especialmente con Kylian Mbappé, a quien considera “una de las grandes estrellas del presente y futuro madridista”. “Hablo mucho con él y está rindiendo a un nivel top. Espero que haga un gran partido en el Clásico y que los tres puntos se queden en casa”, añadió el ex capitán del Madrid.

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Con 16 temporadas en el Real Madrid, Ramos conquistó absolutamente todo: cuatro Champions League, cinco Ligas, dos Eurocopas, un Mundial y numerosos títulos más. Tras su paso por el Paris Saint-Germain y su regreso al Sevilla, sorprendió al fichar por Rayados de Monterrey en enero de este año, donde ha asumido un rol de liderazgo tanto dentro como fuera del campo.

En México, el defensor ha disputado más de 25 partidos oficiales, contribuyendo con su experiencia y su garra característica a un equipo que pelea en los primeros puestos del torneo.

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Aunque vive a miles de kilómetros del Bernabéu, Ramos no se desconecta de su exequipo y sigue cada jornada como un aficionado más. Desde Monterrey, asegura que vivirá el Clásico con la misma emoción de siempre.

“Uno nunca deja de ser del Madrid. Los sentimientos no cambian, aunque esté lejos. Siempre quiero que ganen y que mantengan ese espíritu que nos hizo campeones tantas veces”, comentó el central.

Sergio Ramos continúa escribiendo capítulos en su extensa carrera. Mientras en México se consolida como ídolo de Rayados, su corazón sigue latiendo en blanco. Y este domingo, aunque no vista la camiseta del Real Madrid, todos saben de qué lado estará su aliento.

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