La temporada 2024/25 de la NBA quedará marcada como el año en el que todo le salió perfecto a los Oklahoma City Thunder.

El equipo no solo conquistó su primer anillo de campeón en la historia de la franquicia, sino que vio a su gran estrella, Shai Gilgeous-Alexander, consagrarse como el jugador más valioso tanto de la temporada regular como de las Finales.

Un año inolvidable que no solo puso a OKC en la cima del baloncesto mundial, sino que consolidó a Shai como uno de los cinco mejores jugadores del planeta.

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Temporada histórica de Shai

Tras su brillante desempeño, era cuestión de tiempo para que Oklahoma moviera ficha y asegurara a su estrella por muchos años más. Y lo hizo a lo grande. Según informó el periodista Shams Charania, el canadiense ha firmado un nuevo contrato de 4 años y 285 millones de dólares, lo que supone un salario promedio de más de 71 millones por temporada.

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Este nuevo acuerdo convierte a Gilgeous-Alexander en el jugador mejor pagado de la historia de la NBA en términos salariales anuales. Un reconocimiento directo no solo a su impacto en la cancha, sino a su liderazgo en uno de los proyectos jóvenes más emocionantes de los últimos años.

Shai Gilgeous-Alexander(Photo by Matthew Stockman/Getty Images)
Shai Gilgeous-Alexander
(Photo by Matthew Stockman/Getty Images)

El legado de una temporada histórica

OKC fue protagonista de una campaña brillante, tanto colectiva como individualmente. Con un equipo joven, talentoso y extremadamente bien dirigido, rompieron todos los pronósticos y se impusieron en unas Finales intensas para llevar el trofeo Larry O’Brien a casa por primera vez.

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Shai Gilgeous-Alexander fue el motor absoluto de ese éxito: decisivo en los momentos clave, regular en su rendimiento y capaz de elevar el nivel de todo el equipo. Su doble MVP (temporada regular y Finales) lo posiciona, sin discusión, en la élite global del baloncesto.

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