El defensor del Liverpool, Trent Alexander-Arnold, ha confirmado que dejará el club una vez finalice su contrato el próximo 30 de junio, poniendo fin a una historia que ha durado dos décadas.
El lateral derecho explicó que su decisión responde a la necesidad de asumir “un nuevo desafío” tanto en lo personal como en lo deportivo, aunque admitió que consideró seriamente la posibilidad de quedarse en Anfield.
En una entrevista concedida a los medios oficiales del club, Alexander-Arnold abordó los rumores que han rodeado su futuro en los últimos meses:“Sé que ha habido mucho ruido sobre qué decisión iba a tomar. Algunos querían que hablara antes, otros que esperara el momento justo. Para mí, el enfoque debía estar en el campo. Cuando estás peleando por títulos, lo importante es el equipo, no distraer con temas personales. Quería hablar una vez terminada la temporada, cuando ya no hubiera nada en juego”.
El anuncio llega apenas un día después de que el Liverpool se coronara campeón de la Premier League por segunda vez en su carrera, lo que llevó a muchos a preguntarse si ese éxito reciente pudo hacerlo cambiar de opinión. Sí, por supuesto que lo pensé. Estuve muy cerca de quedarme. Confío plenamente en el entrenador y en la dirección del club; sé que seguirán compitiendo por títulos. Pero sentí que era el momento de experimentar algo nuevo, de ponerme a prueba en otro entorno, como persona y como futbolista”.
(Photo by Carl Recine/Getty Images)
La noticia de su salida no ha caído bien entre algunos aficionados, quienes lo han calificado incluso de “traidor” por abandonar el club de su vida. Sin embargo, Trent se mostró comprensivo con esas reacciones: “Entiendo perfectamente que algunos estén decepcionados. Este club me lo ha dado todo, y también fui niño y aficionado, sé lo que se siente cuando un jugador al que admiras se va. Por eso ha sido una decisión tan difícil. He pensado en esto durante mucho tiempo, y aunque me duele saber que puedo haber defraudado a algunos, siento un gran alivio al poder hablar abiertamente”.
La marcha de Alexander-Arnold representa el cierre de una etapa icónica en el Liverpool, donde pasó de ser un joven de la cantera a convertirse en una figura clave del equipo que ganó la Champions League y múltiples títulos nacionales bajo el mando de Jürgen Klopp.
