La selección de Portugal vivió este martes un momento inolvidable y doloroso. Con la presencia de Cristiano Ronaldo, el seleccionador Roberto Martínez, el presidente Marcelo Rebelo de Sousa y toda la plantilla nacional, se rindió un emotivo homenaje a la memoria de Diogo Jota y su hermano André Silva, fallecidos en un accidente automovilístico el pasado mes de julio en la A-52, cerca de Palacios de Sanabria.
En la ceremonia, la Federación Portuguesa de Fútbol presentó un video con imágenes de Jota: desde entrenamientos y goles celebrados con la selección hasta abrazos con sus compañeros. La narración estuvo a cargo de su amigo más cercano, Rúben Neves, quien leyó una carta de despedida:
“Más que amigos, somos familia. Cuando nos juntemos con la selección, siempre estarás a nuestro lado: en la mesa, en el autobús, en el avión. Nos aseguraremos de que tu recuerdo nunca falte en nuestras vidas”.
El mensaje arrancó lágrimas en el público y en varios internacionales, que se unieron en un aplauso cerrado.
Además del homenaje audiovisual, se descubrió una escultura en bronce con la camiseta número 21 de Jota y la palabra eternizado, ubicada junto al monumento en honor a Jorge Costa, capitán histórico del Porto fallecido semanas antes.
El propio seleccionador Roberto Martínez anunció que el dorsal 21 será heredado por Rúben Neves:
“Ese número representa lo que Diogo nos dio dentro y fuera del campo. Neves era su hermano en el vestuario, y es la persona indicada para mantener vivo ese legado”.
El mediocampista, que coincidió con Jota en el Wolverhampton y fue portador de su féretro en el funeral, decidió además tatuarse un diseño en honor a su amigo, comprometiéndose a llevarlo tanto en la piel como en el césped.
Con este telón de fondo, Portugal encara los partidos de clasificación al Mundial 2026 frente a Armenia y Hungría. El equipo, campeón de la Nations League, inicia su camino sin uno de sus atacantes más determinantes. Sin embargo, el espíritu de Jota seguirá presente en cada concentración, en cada partido y en cada victoria que busque un grupo que ha decidido honrarlo como parte eterna de su historia.
