No hay partido en el que Vinícius Jr. pase inadvertido, y la visita del Real Madrid al Carlos Tartiere no fue la excepción. En la victoria por 0-3 frente al Real Oviedo, el brasileño volvió a acaparar todos los focos pese a disputar apenas media hora.
De suplente a protagonista absoluto
Xabi Alonso sorprendió dejando al extremo en el banquillo de inicio. Con el marcador 0-1, Vinicius ingresó en el minuto 63 y agitó el partido con su habitual intensidad. En el plano positivo, asistió a Kylian Mbappé en el segundo gol y firmó el tercero con una acción individual de calidad.
Pero su impacto no se limitó al fútbol: provocó polémica con una simulación de penalti que le costó la tarjeta amarilla y mostró su malestar en la celebración del segundo tanto, en la que Mbappé tuvo que taparle la boca.

El enfrentamiento con la grada
El ambiente en el Tartiere se caldeó rápidamente. La afición local, que celebraba el regreso del Oviedo a Primera División tras 24 años, coreó “tonto, tonto” cada vez que Vinicius tocaba el balón. El brasileño respondió con un gesto desafiante, mandando “a Segunda” a la grada.
Reacciones posteriores
Las imágenes dieron la vuelta a los medios y provocaron debate en diferentes programas de radio. El exportero oviedista Esteban Suárez resumió la situación en Radioestadio Noche (Onda Cero):
“Vinicius tiene un problema social. Juega por primera vez en el Tartiere y consigue que le piten 30.000 personas. No ha jugado nunca aquí y le dice a la gente que ‘a Segunda’”.
Pese a la polémica, el jugador no se escondió al término del encuentro y dejó un mensaje claro:
“Yo soy así”.