El Real Madrid atraviesa su peor momento de la temporada. A pesar de ser líder de LaLiga y estar en cuartos de final de Champions League, tres tropiezos consecutivos han dejado la sensación de un equipo «desnortado» con un grave problema que va más allá de lo táctico: la actitud y el liderazgo.
El empate ante el Elche evidenció una falta de compromiso y autoridad del técnico Xabi Alonso, cuyo método riguroso parece chocar con la plantilla. Las imágenes de jugadores en el banquillo, como Vinícius Júnior y Valverde, evidencian un pulso en el vestuario.
Adiós a la jerarquía
La época más ganadora del club reciente se sustentaba en «jerarcas» como Kroos y Modric, cuyo poder e influencia iban más allá del césped. La transición generacional en el Real Madrid ha desmantelado ese liderazgo, dejando el vestuario en manos de un núcleo joven e individualista que, según se comenta, siente que el «rigor táctico» les aburre.
Este problema actitudinal se camufló con el triunfo en el Clásico, el cual, según confesaron jugadores, se ganó más por la motivación de las palabras de Lamine Yamal que por el sistema.
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(Photo by Carl Recine/Getty Images)
Xabi vs los jugadores
La falta de autoridad de Xabi Alonso se petrificó al priorizar a los jugadores sobre la gestión de incidentes:
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Vinícius Júnior: Encabeza la «oposición ruidosa» tras sus continuas discrepancias por ser sustituido o relegado al banquillo. Su falta de impacto al entrar de suplente en Elche intensificó el debate.
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Fede Valverde: El uruguayo, también relegado a un papel secundario, mostró una versión «indolente» y alejada del compromiso total que tenía con Ancelotti. En Elche, su indolencia en la presión originó el gol del ‘Toro’ Rodríguez.
Otros jugadores considerados díscolos incluyen a Camavinga. Incluso futbolistas de la confianza inicial del técnico, como Tchouaméni, no parecen estar alineados con el vasco.






