El Real Madrid le costo su clasificación en Butarque, los blancos lograron remontar y sellar su pase a las semifinales de la Copa del Rey tras vencer 2-3 al Leganés. Con una mezcla de titulares y suplentes, el equipo de Carlo Ancelotti vivió momentos de incertidumbre tras la reacción del leganes que puso por momentos el partido 2-2, pero un cabezazo de Gonzalo en los minutos finales terminó sellando el triunfo para los blancos.
El partido comenzó con un Madrid contenido, sin la intensidad habitual y con un Leganés atrevido que quiso sorprender desde el inicio. Sin embargo, la calidad individual del conjunto merengue marcó la diferencia en la primera mitad. Rodrygo y Brahim fueron los más incisivos, y de sus botas nacieron los primeros goles del equipo blanco. Primero, Modric adelantó al Madrid tras recibir un pase de Rodrygo y definir con categoría. Luego, un error en defensa del Leganés permitió que Endrick, siempre atento en el área, ampliara la ventaja.
Parecía que la eliminatoria estaba sentenciada, pero el Leganés no se rindió. Justo antes del descanso, un penalti claro por mano de Jacobo Ramón le dio vida al conjunto local. Juan Cruz no falló desde los once metros y puso el 1-2, encendiendo la ilusión en Butarque.
En la segunda parte, Ancelotti decidió reservar a Rodrygo pensando en el derbi, dando entrada a Vinicius. El brasileño entró revolucionado y tuvo varias ocasiones claras, pero el Leganés, lejos de intimidarse, siguió peleando. Y la recompensa llegó en el minuto 65, cuando Juan Cruz, el más insistente del equipo local, encontró un disparo mordido que, tras un desvío en Mendy, terminó en el fondo de la red. Era el empate y el estadio explotó de emoción.
El Madrid se veía contra las cuerdas, pero la reacción no tardó en llegar. En medio de la incertidumbre, apareció Gonzalo, un joven canterano de 20 años que había brillado con el Castilla. En un córner lanzado por Modric, el defensa conectó un cabezazo imparable para firmar el 2-3 y darle la clasificación al conjunto blanco.
El Leganés luchó hasta el final, pero el Madrid supo sufrir y salir adelante. Con esta remontada, los de Ancelotti avanzan a semifinales y ya ponen la mirada en el derbi del sábado ante el Atlético de Madrid, un duelo en el que la tensión promete estar a la altura de la rivalidad.
