La actuación discreta de Lamine Yamal en el Clásico ante el Real Madrid tiene una justificación física que va más allá del control de sus rivales. Según desveló David Ibáñez en el Twitch de ElDesmarque, el joven jugador del FC Barcelona arrastra una pubalgia desde hace varias semanas.
Esta lesión, que ya le impidió estar con la Selección Española, está afectando su rendimiento, incluso cuando desde el club se asegura que está «al 100%»:
«Por lo que yo sé tiene dolores en el pubis. Es una lesión que es muy difícil que se vaya de la noche a la mañana y va a tener que convivir con ella durante esta temporada mientras no se opere.»
Lamine Yamal preocupa al Barça
Ibáñez señaló que los médicos son reacios a una intervención quirúrgica para este tipo de lesión en el fútbol moderno, ya que implica trabajar en una zona delicada. Por su parte, Yamal «no está por la labor de operarse» por ahora.
El plan del Barça es un tratamiento conservador y riguroso:
- Rutina de Ejercicios: El club le está proporcionando una serie de ejercicios que debe seguir de forma estricta.
- Objetivo: Afrontar mejor esos dolores de pubalgia e incluso lograr que «no les moleste para jugar porque ahora mismo juega con dolor».
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(Photo by David Ramos/Getty Images)
Las Tres Fases Afectadas de su Juego
La pubalgia no solo afecta al estado de ánimo del jugador, sino que tiene un impacto directo y negativo en su estilo de juego, lo que se vio reflejado en el Clásico al desaprovechar las pocas situaciones de desborde y regate que tuvo:
- Esprintar: La aceleración.
- Cambios de Ritmo: La capacidad para desequilibrar a los defensas.
- Golpeo de Balón: La potencia y precisión en el disparo.






